Carlos Rubio Rosell

Carlos Rubio Rosell, autor de Hijos perdidos, ofrece una visión postmoderna de la paternidad que sin duda despertará polémica, con ciertos rasgos autobiográficos. Una novela que invita a reflexionar sobre la otra realidad, imaginada o deseada, que esconden las apariencias.

Descubre a Carlos Rubio Rosell, autor de Hijos perdidos.

¿Periodismo literario o literatura de denuncia?
El amor como inspiración pandémica
El utilitarismo publicitario de la violencia

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¿Periodismo literario o literatura de denuncia?

Carlos Rubio Rosell es un periodista y escritor mexicano, nacido en la ciudad de México en 1963 y radicado, desde 1994, en Madrid, donde se ha desempeñado como corresponsal de noticias para diversos medios, entre otros, MVS Noticias. Autor de libros de muy diversos géneros y temáticas, entre los que destaca su acercamiento periodístico y ensayístico a Carlos Fuentes, siendo, a nivel mundial, el periodista que más veces ha entrevistado, durante 20 años, al célebre autor de La región más transparente. Lo mismo ha publicado en grandes editoriales, como Galaxia Gutenberg, que en editoriales pequeñas e independientes como las mexicanas Editorial Universitaria de la UANL y Ediciones Sin Nombre, y la española Renacimiento.

El amor como inspiración pandémica

El autor de Hijos perdidos publicó su primera novela, Los Ángeles-Sur, con prólogo de Carlos Fuentes, y fue publicitada como «la primera road novelen español», género sin tradición en la literatura latinoamericana, incitó comentarios elogiosos no solo del propio Fuentes, quien la calificó de «excelente e intensa», también de Enrique Vilas Matas y Miguel Sánchez Ostiz. Se trata de una historia de venganza, pero también de una muy actual denuncia social. Su libro de poesía, Los amores idiotas (Editorial Renacimiento, España, 2020), nace de una experiencia traumática. En 2008 recibió un correo de un amigo muy apreciado, diciéndole que acababa de matar a su esposa, hiriendo de gravedad a sus dos hijos, uno de los cuales falleció poco después. Rubio Rosell creyó que se trataba de una mala broma, de un mal entendido, ¿cómo un hombre tan culto y sensible llegaría a tales extremos? Intentó una novela, pero le fue imposible colocarse en los zapatos del asesino. A través de la poesía, por descabellado que parezca, consiguió darle cauce a las palabras que su amigo pudo haber dicho, descubriendo, entre otras cosas, que «la violencia de género está culturalmente arraigada en el lenguaje». Su visión de la violencia ejercida en nombre del amor es la de una pandemia.

El utilitarismo publicitario de la violencia

Entre sus declaraciones más contundentes selecionamos su punto de vista sobre la violencia de genéro en México publicada en el portal efeminista:

«La violencia contra las mujeres en México es una especie de pandemia, donde se calcula que una de cada tres mujeres mayores de 16 años ha sufrido y sufre cotidianamente alguna forma de abuso y violencia, en un país donde la impunidad es de por sí alarmante (…) Es lamentable que las políticas estatales encaminadas a proteger y apoyar a las víctimas de violencia de género pasen por meras campañas publicitarias, algunas francamente desafortunadas, que evidencian la falta de claridad respecto a la raíz de la violencia».

Algunos de los rasgos que Rubio Rosell, autor de Hijos perdidos, destaca de la obra de Fuentes, podría aplicarse a su propia escritura: la gran actualidad de su pensamiento, la solidez de sus planteamientos, su capacidad de generar conciencia, el esfuerzo titánico por comprender la naturaleza y condición humanas.